martes, febrero 13, 2007

Nos dijeron (mucho antes de poder entender) que de eso no se habla.
Nos metieron miedo porque de eso no se habla.
Nos creímos el silencio porque de eso no se habla.
Nos saltó la duda y preguntamos. Nos dijeron que de eso no se habla.
Nos juntamos y cuestionamos por qué de eso no se habla.
Nos rebelamos y empezamos a gritar acerca de eso que no se habla.
Nos callaron. Porque de eso, no se tiene que hablar.

El lenguaje nos limita cualquier tipo de pretensión de neutralidad.
Está bien que así sea. Está bien que así se crea. Está bien que así se entienda. Está bien si así se aclara. Está bien que no se mienta. Está bien si no te venden una imagen armada por ese mismo lenguaje que solo es usado para matarnos.

Nos limitan. Nos encierran. Nos culpan por creer, por resistirnos a caer, por resistirnos a ceder. Nos meten dentro de un concepto vacío de sentido del que no podemos salir. Nos condenan por luchar. Nos condenan por amar. Nos condenan por no discriminar. Nos condenan por no condenar.
Nos inventan. Nos definen. Nos dicen quienes somos, quienes tenemos que ser y que es lo que vamos a ser.
No participamos de su invento y vamos quedando solos. Solos pero juntos.
Entre nosotros.
Entre “los otros”.

Inventaron el negro de mierda
Inventaron el negro cabeza
Inventaron el boliviano, el peruano, el paraguayo
Inventaron el zurdito
Inventaron el vago que no sabe hacer nada
Inventaron el pendejo de mierda
Inventaron el son todos choros
Inventaron el maricón hacete hombre
Inventaron el que no trabaja es porque no quiere
Inventaron el inadaptado de siempre
Inventaron el por algo será
Inventaron el no te metas
Inventaron el no fueron 30.000
Inventaron el somos derechos y humanos
Inventaron el si quieren venir que vengan
Inventaron el trabajás o estudiás
Inventaron el gente de bien

Inventan nuestro dolor, nuestra felicidad, nuestras lágrimas y nuestras risas.

Lo que no han podido inventar todavía es la forma de hacernos callar. A pesar de los tiros, a pesar de los palos, a pesar de los golpes, a pesar de las heridas de su lenguaje (el de la violencia física y el de los inventos), todavía susurramos, todavía hablamos, todavía gritamos acerca de eso que no se puede gritar.

5 comentarios:

mEy! dijo...

si, se exactamente lo que se siente cuando los geminianos les contamos a otros que somos geminianos. Por que nos creen asi?? Provocamos miedo parece, o no...en realidad la reaccion es siempre (como vos bien dijiste): "aahh" o "uhh" o "ufff". Pero no entiendo muy bien a que se refieren con dichas onomatopeyas. Pero sabes que? lo unico importante no es qué hablan de uno sino que haben de uno.

Miquita dijo...

Definitivamente: te quiero en mi equipo. ¿Cuál es tu cotización actual?
Besos niño.

Gringo dijo...

No cotizo. Pero si me querés en tu equipo: convocame por favor!!! Necesito proyectos, ambiciones, TRABAJO (estoy desempleado y en bancarrota) En serio, cumpa, llamame si tenés algo.
Un beso, gracias por las palabras:

yo

Miquita dijo...

Seguro! Ya te voy a avisar, no te preocupes que algo se va a dar.
Besos.

comix dijo...

che gringo... no vas a invitar a nadie a mi blogg?...

Mira que ya aprendi y te puse en el link.

conjurofurioso.blogspot.com

Abrazos de gol